Page 273 - Panorama Audiovisual Iberoamericano 2018
P. 273

CAPITULO IV: BRASIL: UNA DE DÉCADA DE CINE (2008-2017)              273



                El Cine Brasileño del Siglo XXI  se caracteriza por su adaptación continua  a las nuevas
            tecnologías y por la creación de la Agencia Nacional de Cinema (Ancine). Esta adaptación conlleva
            un aumento de producción audiovisual y por tanto de la capacidad de exhibición. En el nuevo siglo
            se han producido películas icónicas como Ciudad de Dios (2002) de Fernando Meirelles, Carandiru
            (2003) de Héctor Babenco y Diarios de Motocicletas (2004) de Fernando Meirelles y que más o menos
            marca el final del Cine da Retomada. A partir de 2005 con la entrada de la televisión en el cine las
            películas autorales dejan paso a películas más comerciales que tienen un gran éxito en taquilla, Se
            Eu Fose Voce (2006) de Daniel Filho, Tropa de Élite (2007) de José Padilha. Además las segundas
            partes de ambas refrendaron el éxito de las primeras.

                La irrupción de la televisión en la producción y difusión de cine autóctono se presenta como un
            hecho clave en la historia moderna del Cine Brasileño. Incluso como ejemplo de loa que está por
            venir, el cine brasileño más popular puede nacer previamente en la propia televisión. Este el caso
            de Moisés y los diez mandamientos (2016), estrenada primero como una telenovela y, posteriormente,
            da su salto a la gran pantalla, convirtiéndose en un éxito en taquilla con más de 11 millones de
            entradas vendidas.


                                        LEGISLACIÓN CINEMATOGRÁFICA

                La descripción que figura a continuación de la legislación cinematográfica brasileña se completa
            con un artículo donde se explican de forma exhaustiva los mecanismos legislativos de fomento
            del mercado cinematográfico del país. Este artículo ha sido escrito por Bárbara Fraga, Alexander
            Kellner y Roberta Rodrigues y figura a continuación de este capítulo.

                En Brasil existen dos leyes fundamentales para incentivar la producción audiovisual autóctona:
            La Ley Rouanet y la Ley  Audiovisual. Estas dos normas no son incompatibles e incluso las
            deducciones que ambas contemplan son acumulables. Los rasgos fundamentales de estas dos leyes
            son los siguientes:

                  · Ley 8.313/91 o Ley Rouanet aprueba el Programa Nacional de Apoyo a la Cultura (PRONAC),
                  incluyendo a las obras cinematográficas. El mecanismo más relevante de incentivo de este
                  programa establece que las personas físicas o jurídicas residentes o no en Brasil que realicen
                  inversiones en proyectos culturales, pueden deducirse en el impuesto sobre la renta una
                  parte de la cantidad destinada a estos proyectos, ya sea bajo la fórmula de la donación o
                  como patrocinio. Esta ley permite, en el caso de personas físicas, la deducción de un 80% de
                  las cantidades invertidas a título de donación en el impuesto sobre la renta y el 60% en el caso
                  de patrocinio. En el caso de personas jurídicas es de un 40% y 30%, respectivamente.

                  · Ley 8.685/1993 o Ley do Audiovisual, incorpora dos tipos de incentivos. El primero permite
                  la deducción en el impuesto sobre la renta de las cantidades invertidas en la producción de
                  obras audiovisuales brasileñas independientes, mediante la adquisición de Certificados de
                  Inversiones que contemplan el derecho de comercialización de la obra y que deben registrarse
                  en la Comisión de Valores Mobiliarios. Los porcentajes de deducción son del orden del 6%
                  para personas físicas y del 3% para personas jurídicas. El segundo incentivo incluido en esta
                  ley es que los pagos a productores y distribuidores extranjeros, como consecuencia de la
                  explotación de obras audiovisuales foráneas en territorio brasileño, están sometidos a una
                  tributación del 25% en origen. No obstante, se permite invertir hasta un máximo del 70% del
                  impuesto a pagar en la producción independiente de obras audiovisuales brasileñas (cine,
                  telefilmes y miniseries).

                La vigencia de los incentivos fiscales incluidos en la Ley do Audiovisual de 1993 abarcaban
            hasta el ejercicio fiscal de 2003. No obstante debido a los buenos resultados, han sido prorrogados
            primero hasta el ejercicio fiscal de 2010, posteriormente hasta el ejercicio de 2017 y, finalmente, la
            prórroga legislativa actual alcanza hasta el ejercicio fiscal de 2019.

                Como consecuencia del desarrollo legislativo en Brasil, se constituye el organismo encargado
            de la regulación audiovisual en Brasil. La Agencia Nacional do Cinema (ANCINE) es una entidad
   268   269   270   271   272   273   274   275   276   277   278